La parada cardiaca súbita puede afectar a personas de cualquier edad, sexo, raza e incluso a personas que parecen gozar de buena salud. Se sabe qué atletas profesionales de talla mundial con una forma física óptima han muerto de forma súbita durante eventos deportivos. Con frecuencia esto se debe a una parada cardiaca súbita.¹
La mayoría de los casos de parada cardiaca súbita se deben a un tipo de latido irregular (o arritmia) conocido como fibrilación ventricular. Los ventrículos son las cavidades inferiores del corazón. Durante la fibrilación ventricular, estas cavidades laten muy rápido y de forma irregular. Esto hace que se bombee poca o ninguna sangre al organismo. Si no se trata en cuestión de minutos, puede producir la muerte.²
Otras causas de una parada cardiaca súbita pueden ser problemas con el sistema eléctrico del corazón. Si las señales eléctricas del corazón se vuelven lentas o se detienen, o si el músculo cardiaco no responde a estas señales eléctricas, se puede producir una parada cardiaca súbita. ²
Factores de riesgo habituales de la parada cardiaca súbita
La mayoría de afecciones cardiacas y de los vasos sanguíneos pueden producir una parada cardiaca súbita. De forma similar, muchos factores de riesgo de afecciones cardiacas son también factores de riesgo de parada cardiaca súbita. Los factores de riesgo habituales incluyen:
- Historial familiar de afección enfermedad cardiaca coronaria
- Tensión arterial alta
- Colesterol alto
- Obesidad
- Diabetes
- Estilo de vida sedentario
- Tabaquismo
- Ingesta excesiva de alcohol
- Envejecimiento
No hay un método seguro para conocer el riesgo de parada cardiaca súbita, por lo que reducir el riesgo general es la mejor estrategia. Hable con su médico sobre su estado de salud en concreto.